lunes, 26 de diciembre de 2011

POR MIS HIJAS

Por mis hijas lo doy todo
Son parte de mi... Su vida es mi vida
La primera de ellas , vino al mundo en el mejor momento
Cuando mas feliz estaba.
Cuando quisimos que llegara.
Fue en el momento de su nacimiento , cuando la felicidad llego a su máximo punto,
no podía nadie ser mas feliz en el mundo.
Fue la primera de mis hijas, la primera de las nietas, la primera de las sobrinas.
Fue todo perfecto hasta que me entro una depresión posparto de camello.
Se me cayó el mundo encima de repente. Empecé a verlo todo negro. Cuanto mas lo pensaba peor me sentía porque me sentía culpable de mi depresión.
¿Como podía estar deprimida si era todo tan perfecto? .
Tenía al marido perfecto, adorable , siempre pendiente de mi, atento , feliz por el nacimiento de su primera hija, enamorado de ella y de mi..
¿Como podía ser tan feliz y a la vez tan desgraciada?.
!No lo pude entender nunca! .
Al ponerme de nuevo a trabajar , decidí que aquello no podía seguir así y me puse en manos de un buen psiquiatra , compañero y amigo mío.
Gracias a él pude salir de esa angustia que me tuvo atrapada durante el primer año de la vida de mi preciosa niña.
Gracias a él y gracias al amor que sentía por parte de todos los que me rodeaban.

Comencé a partir de ahí una vida nueva, mas relajada, disfrutando en cada momento de todo y de todos  .

Así pasaron seis hermosos años y entonces decidí que era el momento de dar otro paso y tener otro hijo.
Me costó convencer a mi marido, el tenía tanto miedo de que me pasase otra vez lo mismo, de que me pusiera otra vez enferma, que había renunciado a tener de nuevo la oportunidad de ser padre.
Pero como estaba tan enamorado no pudo negarse a mi insistente deseo de volver a ser madre por segunda vez.
Tuve también la ayuda de mi hija, a ella tampoco pudo mi marido negarla el deseo de tener un hermanito

. Nació así la segúnda de mis hijas , que resulto ser otra preciosa niña. Hermosísima, adorable. Fue el segundo Angel al que he tenido la gran suerte de tener entre mis brazos.
En su primer año de vida, llore y llore hasta la saciedad, pero esta vez no fue por la depresión , fue por el sentimiento de culpa que tenía en mi interior al darme cuenta del año tan precioso que había perdido con mí hija mayor, por culpa de esa horrorosa depresión.
Todo era tan bonito que no me di cuenta de lo que estaba sufriendo mi primera hija , por culpa de los celos. Pero como era tan buena ,y como , aunque estaba celosa, queria tanto a su hermanita ; no la costó salir de esa angustia.
Fue entonces cuando se dio cuenta de la adoración que sentía su hermanita por ella .
La imitaba en todo, era su ídolo, siempre estaba mirandola para hacer sus mismas cosas y de la misma forma, parecia que queria ser exactamente igual que ella .
Y todo era porque la quería tanto que era como el espejo en el que queria reflejarse, queria ser un "calco" de su hermana.
Asi fueron pasando los años...

 Al crecer se convirtieron en dos hermosas adolescentes...con sus gana de vivir deprisa... 

Yo recordaba mi adolescencia y me daba cuenta de que a mi me había pasado lo mismo.
Las hormonas hervían en mi interior como acelerando mi pulso para vivir rápido , como si faltasen horas para poder hacerlo todo...
Y era por eso, porque  recordé esos años ,  que entendí lo que les pasaba, y aunque no quería que se equivocasen, no pude detener el tiempo para que no sufriesen .
Como es lógico decidí que tenían que pasar lo bueno y lo malo de esa edad tan bonita.
Cayeron en todos los errores en los que yo caí años antes, tuvieron mis mismas ilusiones , mis mismos nerviosismos , mis mismos fallos...
Crecieron como cualquier niña de su edad.
Cuando se enamoraron fue todo muy bonito.
Yo misma me veía reflejada en ellas de nuevo

Han ocurrido tantas cosas a su alrededor como al mío...

Ya son dos mujeres preciosas, adorables , a las que queremos y nos quieren con locura.
Seguirán adelante como cualquiera, con sus amores, sus desamores, sus sueños, sus ilusiones... Pero siempre serán mis niñas, mis preciosas hijas.  Mis pasiones. Mi vida

                                                                            Amistad

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